Nuestros coches son cada vez más innovadores y ligeros y se deslizan ágilmente por los circuitos de todos los rincones del planeta. Es justo esta tecnología punta y el espíritu de libertad que dejan a su paso lo que ha querido reinterpretar el artista Arne Quinze. Su escultura evoca el futuro del automóvil, en pleno cambio gracias a los avances tecnológicos. Se trata de una reinterpretación del Alpine A110 que, desde la perspectiva del movimiento y la ligereza, muta hasta cobrar forma en una escultura tecnológica y poética.
UNA ESCULTURA QUE RINDE HOMENAJE A LA VELOCIDAD Y LA LIGEREZA
Una estructura de aluminio en forma de panal con luces LED emana del Alpine A110, que parece levitar. Como si de una manifestación onírica de su tecnología se tratara, representa la velocidad de la luz, tan potente como natural. Valiéndose de este elemento, Arne Quinze busca el equilibrio perfecto entre la expresión de la fragilidad y el poder de la naturaleza. A través de la incorporación de destellos que se mueven por la escultura, Quinze alude a la sensación de estar inmerso en un entorno que va perdiendo nitidez durante una carrera, hasta que el conductor termina fusionándose y volviéndose uno con el coche.
«Esta obra es fruto de un diálogo apasionante con Alpine para imaginar una forma novedosa que representa lo que para mí simboliza la magia de las carreras: la velocidad y la fusión entre el piloto y el coche, entre el ser humano y la tecnología, entre la velocidad y la naturaleza. Estoy convencido de que la observación de la naturaleza es lo que nos permite dar con las soluciones más técnicas, y eso es lo que he querido representar aquí».
El artista belga Arne Quinze es un verdadero apasionado por los coches de carreras. Como pionero en la instalación de obras de arte público a gran escala, el artista transforma las calles en museos al aire libre. Acompañado por su estudio, Arne Quinze se rodea de ingenieros, técnicos de iluminación y consultorías técnicas. Desde la soldadura hasta la tornillería, trabaja manualmente en procedimientos precisos que toma prestados del mundo del automóvil para montar el aluminio, el acero y las luces LED con los que crea sus esculturas.